Rusia quiere obtener el derecho de no dejar entrar los alimentos desde Belarús, inclusive en el caso de que dispongan de un certificado veterinario. Hoy en día Rusia no tiene dicha autorización y en el Convenio de la Unión no existe un mecanismo de renuncia del reconocimiento bilateral de los certificados veterinarios, según informa el periódico Kommersant.

La parte rusa envió a la Comisión Económica Eurasiática una solicitud vinculada con la obligación de reconocer los certificados veterinarios emitidos por Belarús. Dicha decisión fue adoptada el 22 de enero del año 2019 y fue una reacción causada por la prohibición de exportar a Rusia leche, crema de leche y la leche en polvo envasada de un peso superior a 2,5 kilos. Tales restricciones fueron reconocidas ilegales por la CEEA. La anulación de dicha decisión se estaría viendo en la reunión del Consejo Intergubernamental Euroasiático que se estaría llevando a cabo el 30 de abril en Ereván.

Según la opinión del Viceprimer Ministro de la Federación de Rusia Anton Siluanov, dicha decisión es “una señal equivoca de la oportunidad de abusar sin ser castigados”. Asimismo, él señaló en su mensaje dirigido al Presidente de la Comisión Tigrán Sarkisyán que Belarús emitía certificados inclusive para los alimentos producidos por plantas procesadoras que no gozaban de los equipos necesarios. Además, las autoridades rusas insistieron en no considerar la prohibición de la exportación de materia prima como un cierre del mercado, puesto que los despachos de productos en embalajes pequeños no se estaban limitando.

El 23 de febrero dicha posición fue apoyada por el Primer Ministro de la Federación de Rusia Dmitry Medvedev quien propuso suspender la entrada en vigor de la decisión tomada por la UEEA hasta analizarse su anulación. Dicha decisión entró en vigor a fines de febrero.

 

Fuente: www.agro.ru